No fue una fiesta a pesar que ganó el local, Tahuichi se coronó campeón de su Mundialito y tuvo su coronación en el Ramón Aguilera Costas, el equipo rival, abandonó el campo, chicos de 15 años, armaron una trifulca que involucró agresiones a Policías al sentir que el arbitraje ayudaba al equipo local.
Más allá de los incidentes finales, Tahuichi se dio el gusto, festejó y dio la vuelta olímpica ante pocos espectadores que asistieron a la final. Danubio abrió el marcador a los siete minutos con Juan Manuel Gutiérrez. A los 66, Nicolás Surubí de cabeza igualó cifras. Diez minutos más tarde llegó el segundo gol, Jhon García recibió otro centro y anotó el tanto del triunfo y de la polémica.
Los uruguayos reclamaron una mano en esa maniobra, lo hicieron de manera excesiva, saliendo de las casillas, golpearon a rivales, árbitros y polícias, todos respondieron. Restaban catorce minutos de juego, pero los Charrúas no querían seguir, se sintieron “robados” y abandonaron el campo. El arbitro decretó el final del torneo, que se empañó con un final vergonzoso, Tahuichi fue campeón así, por abandono del rival y con un mal arbitraje del juez Hugo Luis Méndez, sin experiencia en partidos profesionales.
Los uruguayos ofendidos decidieron no volver a participar de este torneo, al que vienen asistiendo hace varios años, “No pueden organizar un torneo. Pasan cosas muy raras”, expresó el DT de Danubio, Alberto Cardaccio. Mientras que los locales que dirige Roly Paniagua, festejaban, eso si, también hablaron de los sucesos: “Danubio fue un gran equipo, pero ha empañado su campaña con todo lo que hizo al final. No podíamos perder el título en nuestra casa”, dijo el DT de Tahuichi.
