La victoria de Guabirá al vigente campeón nacional no es un resultado sorpresivo en el fútbol boliviano, mucho menos para los seguidores del club montereño, ya que el trabajo del entrenador nacional Tucho Antelo viene dando sus frutos por sobre todo porque tiene continuidad.
Continuidad a los proyectos es una de las deficiencias más grandes que tiene el fútbol nacional, la mayor parte de los equipos busca resultados rápido, sin planificación y cortando cabezas a los entrenadores tras tres o cuatro partidos jugados.
Situación que no ocurre en Guabirá, quien a la cabeza de su Presidente Rafael Paz, le han dado apoyo a Víctor Hugo Antelo para conformar un equipo que a largo plazo consiga un título, que es el objetivo. Desde su llegada, Antelo, ha conformado un equipo modesto, sin grandes contrataciones, le ha dado la oportunidad a jóvenes jugadores.
El pasado torneo ya dio muestra de su solidez en condición de local donde no perdió ni un partido y ahora arrancó el Clausura goleando al campeón, Antelo es de los pocos técnicos que tiene un contrato largo – por un año y medio más – y sin hacer grandes cambios en su plantel busca refuerzos que de verdad le aporten y suplan las bajas que ha tenido.
“Estamos trabajando de manera calmada, sin hacer mucha bulla, apostando a lo que el técnico Tucho Antelo pide, y se ven los buenos resultados” remarcó el Presidente de Guabirá tras el gran inicio de torneo.
