El Hernando Siles estuvo cerrado por casi tres meses, y la verdad es que los resultados del trabajo realizado han sido nulos. Se ha jugado Copa Libertadores, algunos partidos de la Liga y hasta un partido de Eliminatorias, y todos se quejan del suelo del Estadio, la cancha está mal, la pelota pica mal, se hace incontrolable, expone a los futbolistas a lesiones graves, está disparejo, entre las cosas más graves.
El campo de juego está rodeado de cemento, pero hay un borde con una zanja que casí le cuesta una grave lesión a Juan Carlos Arce, ¿alguien de la Gobernación o del Servicio Departamental de Deportes ve fútbol?, siguen pasando los días, y suman las quejas.
A todo eso, los atletas se siguen rompiendo las rodillas, entrenan y hacen atletismo en cemento, la pista atlética sigue sin fecha, sin presupuesto y sin solución. ¿Hasta cuándo?
Peor aún, las condiciones de trabajo para la prensa son cada vez más decadentes, en partidos clase A, todo desborda y no hay planes. No existe una tribuna de prensa, no existen zonas mixtas, no existe una sala de prensa, la habitación de la sala de conferencia es algo improvisado.
El Siles está quedando obsoleto, o las autoridades a cargo, están dejando que el Siles se haga aún más viejo de lo que es.
