Dos polos opuestos en un resultado

Fue un 1-1, histórico para los Escandinavos, decepcionante, y hasta preocupante para los Argentinos.
Foto: @btoae / Late!
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MOSCÚ. Por un lado debemos elogiar lo importante, lo que viene consiguiendo esta generación de futbolistas islandeses, que son producto de un trabajo pensando en esto, en lograr nuevos hitos, nuevas marcas, son un equipo que se forma con un objetivo claro, jugar su primera Copa del Mundo e ir a competir, pues lo lograron, le empataron a la Argentina de Messi, que hizo todo lo contrario al rival de turno.

En cancha Argentina siempre pareció muy superior en nombres, individualidades y un peso específico bien marcado en cada línea, ahora a la hora de armar juego en conjunto, los dirigidos por Heimir Hallgrimsson, fueron mucho más inteligentes, más compactos, más equipo.

Si, porque a pesar de encontrarse en desventaja tras un gran gol de Sergio Agüero, supieron encontrar la calma, el camino al empate, y aprovecharon una de las tantas facilidades y desatenciones en defensa. Alfred Finnboganson del Ausburgo alemán, logró algo que no estaba en los planes de Sampaoli, que no estaba en planes de casi nadie en Argentina, es que subestimaron a un rival serio, a uno que trabajó mucho para llegar a este día, mientras que ellos, dejaron que el tiempo pase, que se conforman con la gran agrupación de estrellas y a la que aún le falta mucho por consolidar como equipo, fue un 1-1, histórico para los Escandinavos, decepcionante, y hasta preocupante para los Argentinos. Incluso Messi tuvo una clara chance de penal y terminó errando.

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