Juan Carlos Manuel Aguilar Peña es un joven tenista nacido en Londres, de padres paceños y que radican en Montreal, Canadá. Tiene 17 años y disfruta del título de dobles del US Open junior que ganó con su amigo Felipe Meligeni de Brasil, rodeado de su familia: Claudia, Ana-Cecilia (hermanas) y sus padres Teresa y Juan Carlos.
Es un chico que está siempre rodeado de la contención familiar, sus padres lo apoyan y lo acompañan en casi todos sus viajes, es que como tenista se la pasa al menos nueve de los doce meses del año viajando, buscando torneos para sumar puntos ITF y ATP. Por eso hasta los estudios son especiales, como casi todos los tenistas que sueñan en grande, las clases deben ser a distancia, el High School University of Nebraska es su colegio virtual y ahora en unas semana comenzará a cursar su último año.
Sus primeras armas en el tenis, las hizo en el Club de Tenis de la Florida en La Paz, tenía cinco o seis años cuando ingresó, Irineu de Araujo fue uno de sus formadores, Horacio Valenzuela, Ramiro Videa y el capitán de la Copa Davis, Mauricio Soliz, también aportaron a su tenis, aunque todos coinciden en que sus capacidades eran innatas, había y hay mucho potencial en él, que ademas asume su rol con mucho trabajo, siendo un junior lo hace de manera casi profesional en el exterior. En 2010 se fue a Ecuador y en 2012 dio el salto a Canadá con su familia, lo que le ha servido para crecer en su técnica y potencia en su brazo derecho.
Actualmente el único patrocinio que tiene es para equipamiento, Babolat le provee raquetas y ropa, pero lamentablemente no tiene ningún otro apoyo económico. Y todos sus logros son fruto de su familia. Que lo ha visto crecer en su principal sueño, convertirse en un tenista profesional. Admira a Rafael Nadal y es amigo de los dos tenistas más emblemáticos de Bolivia: Hugo Dellien y Maríá Fernanda Álvarez, ambos lo admiran y compartieron cancha en este último tiempo, saben que lo que logró en estos días no es algo más, es un paso fundamental en su vida como tenista y sobre todo es un empujón al deporte blanco en nuestro país.
