Es el equipo que más ha invertido, ha cambiado a casi toda su plantilla y esa decisión le está costando caro, no sólo por el precio que pagó por los jugadores, si no porque en siete partidos jugados, suma cuatro derrotas, tres empates y amanece en el último lugar de la tabla de posiciones.
De aquel 20 de diciembre de 2015 a este 26 de septiembre de 2016, el equipo ha cambiado el 99% de su plantilla, de los jugadores que dieron la vuelta olímpica quedan dos, Marcos Ovejero y Jordy Candia, el resto es todo un equipo nuevo que se cambió al final de la temporada pasada para comenzar esta con el objetivo de afianzar el equipo que jugará en Copa Libertadores 2017 por primera vez en su historia, pero aún no sabe ganar un partido.
Pero no hay respuesta, la salida de Carlos Leeb dejó el primer cambio en la dirección técnica, ahora en este torneo volvieron a hacerlo, en tres fechas cambiaron a Eduardo Villegas -no aguantó la presión- y se fue por decisión de la dirigencia de Warnes, ahora Xabier Azkargorta, en cuatro partidos sumó sólo dos puntos, uno en Sucre y otro en Warnes, pero la caída por 3-0 en Potosí, fue dura, no sólo por el resultado y porque dejó al Toro en el fondo de las posiciones, si no porque no hay respuesta en la cancha, y su equipo lleno de nombres de Selección y figuras del fútbol boliviano, no hace pie en ninguna cancha del país.
