SÃO PAULO. Llegó el momento de Villegas: después de una larga espera, el cochabambino dirigirá por primera vez a la selección nacional en un partido por puntos. El rival será nada más y nada menos que Brasil, el anfitrión de la Copa América, en el mítico Morumbi. ¿Qué espera el seleccionador de este partido y de su etapa al mando de la Verde?
Expectativas: “Por la idea que intentamos darle al equipo, yo creo que sí vamos a tener una mejoría. El tiempo de entrenamiento y las horas de compartir vídeos y charlas tienen que ayudar. (…) Hay que hacer un partido perfecto, un partido mejor que el que hizo Qatar y muchísimo mejor que el que hizo Honduras, y tener ingredientes futbolísticos mucho mas altos que los que hemos tenido en nuestros últimos partidos”.
Propuesta futbolística: “Jugar al fútbol también es evitar que el rival genere, y Brasil genera bastante. Ese es un factor que estamos cuidando mucho y bien, ojalá se pueda ver en el campo. Quisiera un equipo con agresividad y control de balón. A través de esos factores podemos lastimar a Brasil”.
Motivación y evolución: “Los chicos están muy motivados y comprometidos con este proyecto de hacer un cambio en nuestra forma de vivir el fútbol. El fútbol moderno está bastante acelerado, en acción y en decisión, y obviamente nuestra liga está un poco baja en ese sentido, estamos acostumbrados a ello, pero a través de las imágenes estamos buscando la dinámica que necesitamos para contrarrestar a los rivales. Hay motivación en ese sentido”.
El crecimiento soñado: “Este aspecto del miedo escénico es muy real, nos pasa permanentemente en competencia internacional. Estos partidos nos tienen que permitir superar ese aspecto. Intentamos hacerlo con rapidez y buen manejo de balón. (…) Ningún equipo es invulnerable, y ningún equipo es invencible. Eso está claro. Brasil es fuerte, pero no invencible. (…) Bolivia tiene respuestas futbolísticas y jugadores que saben generar ofensivamente y convertir goles, pero lo primero tiene que hacer es defender, y defender bien”.
La ausencia de Neymar: “Al no estar Neymar, la fisionomía de Brasil cambia: en ofensiva pierde, pero defensivamente (Neymar) no marca demasiado, y hoy en día un jugador que no haga la labor que corresponde genera posibilidades (para el rival). Ahora veo un Brasil mas compacto que trabaja en equipo”.
Objetivos: “Quisiera un resultado mas futbolístico que numérico, que nuestra selección vuelva a jugar bien. Si jugamos bien, tendremos más posibilidades de ganar. (…) Como objetivo, nos hemos trazado avanzar de fase. Después, lo que venga. (…) Estamos fortalecidos por la humildad y sencillez de este cuerpo técnico. Hemos trabajado con la mayor parte de estos jugadores en clubes y hemos provocado que su rendimiento sea alto. Necesitamos garra boliviana y espíritu de lucha”.
