Foto: Marka Registrada
Desde que asumió a su cargo, el DT de Bolivia optó por buscar encender la chispa entre los jugadores, la selección y la gente, uso una palabra, mística.
Julio César Baldivieso es el entrenador boliviano más mediático y con más carisma, eso no cabe duda, y desde que asumió el mando en la Selección de Bolivia, han cambiado muchas cosas, tantos fueron los cambios que varios referentes, prefirieron dar un paso al costado.
Julio debutó en un amistoso ante Argentina, con sólo dos días como seleccionador llegó a ese partido y su equipo sufrió una goleada ante Argentina, eso generó el corto circuito con Ronald Raldes y Marcelo Martins Moreno. Los jugadores han perdido las ganas por jugar en el equipo verde, eso -según el DT- se lo dijo Ronald Raldes. Baldivieso lo hizo público y estos dos jugadores decidieron dar un paso al costado por que entendieron que se rompieron los códigos. Eso fortaleció a Julio en el cargo, el publico tomó partido por el DT, y no así por los jugadores.
Con ese respaldo, y con una formación militar, por que su padre perteneció muchos años al ejército de Bolivia, Julio optó por buscar apoyo para fortalecer el caracter de sus jugadores. Los 30 convocados en este ciclo de trabajo, se asesoraron con un profesional, Jorge Cámpora que título el proyecto “El Camino de la Gloria”. Pero no solo eso, tuvo charlas motivacionales con altos mandos militares, visita al Colegio Militar, paseo por el museo Militar, todo esto con un fin, buscar que se encienda la chispa del amor por la Patria. Julio en la previa parece haberlo conseguido. El bus del equipo hasta hace algunos meses andaba indiferente por las calles de la ciudad, hoy es acompañado de bocinas y banderas.
Su forma de encarar el proceso, ha hecho que no sólo los jugadores -nuevo y no tan nuevos- se identifiquen con el proceso que lidera Julio junto a su equipo de trabajo. que está plagado de jugadores mundialistas del 94, si no que se sumen todos los bolivianos. Tanto así que el mismo Presidente del Estado, Evo Morales, ofreció “el premio que quieran”, a los jugadores, siempre y cuando logruen la hazaña de llevar a Bolivia al Mundial.
En la previa el trabajo de Julio César Baldivieso ha sido bueno, ha logrado sus primeras metas, ahora es tiempo de ver si la llegada al grupo ha sido tan buena como se ve fuera de la cancha, pero con resultados ya en el campo de juego.
