Bolívar tapa sus heridas con más alegrías. Si bien no sufre goles en contra, recibe sentidos golpes a su equipo. Aunque, eso le permite demostrar la calidad de su plantel cada partido que pasa. Este miércoles otra vez se sobrepuso ante nuevas bajas y goleó por 3 a 0 a Independiente en el Hernando Siles con sus jóvenes talentos dando la talla. Ahora, son 7 los puntos de distancia que saca en la cima de la Liga Tecno.
Independiente fue un duro hueso de roer, solo que pagó caro su noche imprecisa. Con Sebastián Ibars como el capataz en defensa frenó las arremetidas de Bolívar. El equipo de Flavio Robatto dominó de principio a fin. De tanto intentar, cerca de la media hora de partido, Leonel Justiniano con su centro y la disputa de Fernando Saucedo en el área, Yosser Suárez acabó derribando la muralla de su equipo.
A los 40 minutos, llegó el primer golpe anímico, puesto que Alfio Oviedo se tiró al césped y no pudo terminar el primer tiempo. Ramiro Vaca lo sustituyó y Bolívar jugó desde ese momento sin centrodelantero. La afición también puso su parte porque en las tribunas alentaron a su equipo en su salida al descanso.
Bolívar entró al segundo tiempo como si nada hubiera pasado. Atacó y no dejó de hacerlo. A la hora de partido, gracias a la falta que recibió Jhon Velásquez por sus regates, el capitán desató el desahogo Celeste. Dejó atrás todas las emociones en contra y con un tiro libre perfecto las transformó en alegría. Leonel Justiniano cargó con las energías de sus compañeros para sacar un golazo.
Ese gol bajó la tensión de Bolívar, mas no la intensidad. Ramiro Vaca se combinó con Ervin Vaca y este último estrelló la pelota en el travesaño. Minutos después, en su intención de cortar un ataque rival se barrió, se paró y pidió su cambio. El sub-20 con lágrimas en los ojos se metió en el camerino. Diego Arroyo no se achicó y cubrió la banda izquierda como si fuera un experimentado más.
El equipo sintió la salida de Ervin Vaca. Le costó volver a su intensidad mostrada. Independiente no aprovechó ese momento. Generó opciones claras, pero desperdició todas ni su goleador estaba certero. A los 88, Bruno Méndez volvió a sumar minutos con el primer equipo de Bolívar. También demostró sus características juntándose con los demás.
Papu luego de recibir varios golpes siguió encarando hasta el final. En su última intención, fue derribado en el área y el juez cobró penal. Gustavo Salvatierra le adivinó la intención a Carlos Melgar, pero el VAR determinó que se repita el penal. Tonino recibió la confianza de su equipo y a su estilo decretó la goleada con el tercer tanto.
Bolívar volvió a golear en la Liga Tecno. Antes The Strongest había tropezado en Potosí, así que con su capitán como principal figura la Academia aprovechó. Alcanza los 37 puntos y se va al receso con 7 de ventaja respecto al segundo lugar.