Para Bolívar, la caída en Montero significa dejar una puerta abierta para perder la punta del torneo. Ahora depende de lo que pase con Wilstermann y su visita a Oriente este jueves.
Esta fue la tercera caída de la Academia en el campeonato, la segunda fuera de La Paz. En la segunda jornada cayó ante Wilstermann en Cochabamba, luego fue San José el que lo sorprendió en La Paz y ahora le tocó caer en Montero.
En el cierre de la primera ronda, Bolívar depende de lo que haga el Rojo, que tiene una salida de riesgo ante Oriente Petrolero para saber si logra sostenerse en lo más alto o deberá pelear su chance de volver a la cima en un mano a mano con el Aviador en dos fechas más.