La histórica chance para terminar la obsesión

Es la deuda pendiente de San Lorenzo. Es la figurita más difícil, la copa que falta en su vitrina, su obsesión. Los “Cuervos” están ante la gran chance de ganar la Copa Libertadores. El miércoles, desde las 19.45, enfrentarán a Bolivar, en la ida de la semifinal, e intentarán alcanzar algo que jamás pudieron conseguir: jugar la final. De tres veces que llegaron a semifinal, San Lorenzo siempre se quedó en esa instancia. Tal vez la vencida sea la cuarta…

Antes de la actual edición, la última participación de San Lorenzo en la Copa Libertadores fue en 2009. En esa ocasión, compartió el grupo con San Luis de México, Universitario de Perú y Libertad de Paraguay. No pasó la primera fase. Agustín Orión, “Papu” Gómez, Andrés Silvera y Gonzalo Bergessio eran los estandartes de ese equipo que dirigía Miguel Russo.

La que dirigió Russo fue un fracaso porque los de Boedo llegaron a esa Copa con aspiraciones altas debido a los buenos resultados que consiguieron en 2008. Con los aportes de Marcelo Tinelli, habían armado un equipo alrededor un gran jugador: Andrés D’Alessandro. Además, la experiencia de Ramón Díaz en el banco de suplentes. San Lorenzo arrancó bien. Pasó sin problemas el grupo que compartió con Cruzeiro, Real Potosí y Caracas. Superó a River, en aquel histórico partido donde lo eliminó con nueve jugadores en el “Monumental”. Y cayó ante Liga de Quito, dirigido por entonces por su actual entrenador, Edgardo Bauza, por penales, después de que Agustín Orión hiciera “jueguitos” adentro del área y, así, generara el primer gol de los ecuatorianos. Justamente Liga terminó quedándose con la Libertadores.

Entre 2000 y 2005, solo se ausentó en 2003 y 2004. Un fracaso atrás de otro: siempre afuera en la zona de grupos. Incluso con Manuel Pellegrini en el banco después de ganar el campeonato en el 2001, o con la Copa Sudamericana en el bolsillo, San Lorenzo, en esos años, no pudo afianzarse en el torneo continental más importante. Y eso que tuvo jugadores: Bernardo Romeo, Leandro Romagnoli, Walter Erviti, Fabricio Coloccini. El ganador, en dos de esas ediciones, fue Boca.

Más atrás, en 1996, encabezados por Oscar Ruggeri y comandados por Héctor Veira, llegaron a la Copa con el histórico título de 1995 en su espalda. Biaggio, Silas, Passet, y Monserrat, entre otros, se metieron en cuartos de final. Se enfrentaron con River. Salieron dos partidos bárbaros: River ganó 2-1 en el “Nuevo Gasómetro” y empataron en el “Monumental”, en la vuelta. Fueron los “Millonarios” levantaron el trofeo.

A la misma instancia llegaron en 1992. Otro argentino fue el victimario: el Newell’s de Bielsa, que finalmente cayó en la final ante el San Pablo de Telé Santana. Los cinco goles de Alberto Acosta no alcanzaron para hacer una mejor participación.

Pasaron 26 años de la última vez de San Lorenzo en semifinales. Hasta entonces, era costumbre: de tres participaciones, siempre habían llegado a meterse entre los últimos equipos. En 1988, también lo sacó Newell’s. Gabriel Batistuta, quien convirtió en la vuelta, fue demasiado.

En 1973, un gran Independiente se quedó con el grupo de tres clubes que otorgaba un pasaje a la final. Ayala, Veglio, Scotta. San Lorenzo venía de ganar el Metro y Nacional de 1972. De todos modos, tampoco fue posible. Ni siquiera en 1960. El Peñarol de Alberto Spencer venció a los “Matadores”, con José Sanfilippo como figura, en un partido desempate que se jugó en el Centenario de Montevideo. Los “Manyas” finalmente salieron campeones.

A la edición 2014 llegaron como campeones. Sortearon rivales difíciles: sacaron a Botafogo, Gremio y Cruzeiro, a estos dos últimos en Brasil. Ahora, luego la llave ante Bolivar en semifinal y una histórica final en Asunción ante Nacional de Paraguay, que con un empate a uno lo deja a tiro de aprovechar una oportunidad histórica para San Lorenzo. La gran chance de que es la obsesión, esa maldita obsesión de cualquier hincha, mejor escenario posible no hay, en casa, con su gente y con todo a su favor.

Fuente: Diario Popular