Los aficionados brasileños casi agotaron los boletos de la tribuna de general. Ayer se vendieron 10.027 en el primer día, con una recaudación de Bs 1.458.660.
Los hinchas brasileños sentaron presencia en el primer día de venta de las entradas para el partido de mañana entre Bolivia y Brasil (15:30) en el Tahuichi. Es que los seguidores de la ‘Canarinha’ fueron los más entusiastas; coparon las filas del sector de general y pese a la llovizna que cayó, sobre todo por la mañana, no se movieron hasta conseguir el boleto que les permitirá ver de cerca a Neymar y a Ronaldinho.
La selección que dirige Luiz Felipe Scolari llegará hoy a Santa Cruz en vuelo chárter programado para las 20:30. Se ha desplegado 84 policías que resguardarán la seguridad del bus que ingresará hasta la pista del aeropuerto y que saldrá directo hacia el Sun Hotel que está enfrente. No habrá contacto con los medios ni con los hinchas. “Será similar a la seguridad que hubo cuando llegó Argentina”, dijo Fernando Sattori, de protocolo de la FBF.
La euforia de los brasileños es clara y de acuerdo con lo que manifestaron ayer, la idea es concentrarse en el sector de general. “Están viniendo de La Paz, de Cochabamba, de varias partes del país; es un sueño ver a Brasil acá”, dijo Felipe Barroso, que aclaró que no le importa el resultado, sino “estar cerca de Neymar”. En las filas se vieron camisetas de Sao Paulo, de Palmeiras, de Atlético Mineiro y hasta de Gremio, con el apellido Moreno en la espalda.
Es un hecho que muchos de los aficionados se trasladarán hoy hasta el aeropuerto y hasta el Sun Hotel para saludar a sus ídolos. Ayer llegó una comisión de avanzada liderada por el gerente de la Confederación Brasileña de Fútbol, Guillherme Ribeiro, más un jefe de seguridad. Hoy, junto al plantel, estará José María Marín, titular de la CBF, que mañana compartirá el palco con Carlos Chávez.
Fuente: El Deber
