El sexteto cochabambino de Olympic sumó la pasada semana su tercer título sobre cuatro posibles, luego de doblegar en la final al también valluno Albert Einstein. Pero esta consagración no es producto de la casualidad ni de la buena fortuna. Es parte de un proceso silencioso que se encaró desde hace mucho tiempo.
“Tercera Liga (Superior) nacional ganada de cuatro Jugadas (2015-2016-2018) y un Subcampeonato en 2017. No es casual… mucho plantel… mucho equipo. Ahora Sudamericano de Clubes Campeones Brasil 2019”, sostuvo Alejandro Giménez, entrenador del equipo valluno.
Olympic es uno de los muchos clubes que participan en la Asociación Departamental de Voleibol Cochabamba (ADVC), pero uno de los muy pocos que cuenta con un escenario propio y escuela en diferentes categorías.
Tras caer en la final de 2017 ante San Simón en La Paz, Olympic llegó a organizar la XXI versión en casa y con la mira puesta en alcanzar nuevamente el título nacional.
En la Liga Superior, Cochabamba llegó con cuatro clubes (Olympic, Albert Einstein, San Simón y UCB), además del paceño UCB y el orureño América.
En su debut en el grupo B, Olympic superó al debutante Albert Einstein por 3-0 (25-17, 25-12 y 25-18).
En su segunda presentación, el sexteto olympiquista arrasó con América, gracias a los parciales de 25-23, 25-18 y 25-12 (3-0).
En semifinales, Olympic se cobró la revancha sobre San Simón, elenco con el que perdió la final de 2017. En el trámite del cotejo, las dirigidas por Giménez vencieron por 3-0 (25-17, 25-13 y 25-13).
Invictas y sin ceder un solo set, Olympic repitió la dosis 3-0 ante el sorprendente Albert Einstein. Los parciales para la consagración fueron 25-17, 25-14 y 25-23.
Al final, Olympic logró una nueva corona en su haber, producto de un gran esfuerzo individual y colectivo que llevó a la institución cochabambina a un nuevo logro. No es producto de la casualidad, sino de un trabajo consciente y dedicado.
Fuente: Los Tiempos
