El 2-2 en Montero dejó como saldo varias cosas, sobre todo para el Lila, que ante la derrota de Aurora y Universitario vale mucho el punto sumado, pero en el vestuario Rojo, Pedro Chávez se animó a acusar a los jugadores de Real Potosí..
“Es un negocio que tienen, como no cobran hace varios meses, se dedican a las apuestas deportivas”, dijo el paraguayo el equipo de Montero, que a su parecer, la actitud de varios jugadores durante el juego es llamativa.
No es la primera vez que hay este tipo de sospechas, el año pasado Daniel Cordoba y Sebastián Paraut que trabajaban en la U de Sucre, denunciaron que varios de sus jugadores, en los partido con Real Potosí y Nacional Potosí tenían hitos marcados para cobrar entre 10 mil y 50 mil dólares, porque no se trata de apuestas a resultados finales, sino a hitos, como el score al finalizar el primer tiempo, cantidad de córners, y combinaciones entre situaciones “normales” de un partido.
Ahora con la nueva denuncia de Chávez, los jugadores del Lila respondieron, ¡ofendidos! como es el caso del experimentado Darwin Peña dejó su postura “Él (por Chávez) debe saber de las apuestas porque es paraguayo y las apuestas ingresaron a Bolivia desde ese país”.
Lo grave del asunto es lo que dijo después, porque Peña confirmó que hubo un jugador fue tentado en la primera parte del año, aunque no especificó quién o de dónde vino la tentación: “En el primer torneo de este año tentaron a un compañero y este vino y nos lo contó. Ahí se frenó todo”.
Ahora que el fútbol profesional tiene directiva y que el futuro presidente de la División -Robert Blanco- será posesionado en diciembre, y él mismo sospecha de algunas cosas, podría ser un buen momento de que se tomen cartas en el asunto, porque Blanco afirmó al diario El Deber que se enteró de dos resultados antes que se jueguen dos partidos de su Club. Motivo suficiente para iniciar una investigación oficial.
