A falta de días para la conclusión de la Copa del Mundo, las grandes figuras de los equipos remanentes, más que nunca, están bajo todos los reflectores del planeta fútbol.
Hazard, Mbappé y demás jugadores no sólo juegan por el trofeo más importante de todos, sino también, potencialmente, por un fichaje millonario y hasta el Balón de Oro.
Barcelona, Real Madrid y demás conjuntos de peso, como es habitual, esperan que finalice el certamen para romper el mercado con compras espectaculares.
Aparentemente, habrá sorpresas de cara a la nueva temporada europea. Por eso, la presión es mayor: una victoria podría marcar un antes y un después en sus carreras.
