En un partido intenso de ida y vuelta, con emociones en ambos arcos, el plantel de Petrolero derrotó a Blooming por dos goles a cero, en su primer partido en condición de local. Aunque fue el plantel celeste de Santa Cruz quien comenzó creando mas peligro en el arco defendido por Brun, fueron los locales quienes en los minutos finales del primer tiempo abrieron el marcador de con un penal convertido por Diego Rivero tras una falta de Carlos Tordoya en el área.
El penal se convirtió en el minuto 44 de la etapa inicial y tan sólo un par de minutos después aprovechando una desatención de la defensa cruceña, Juan Camilo Ríos puso el segundo gol de la tarde. El marcador no se volvió a mover pero las opciones de gol no desaparecieron, continuaron creándose en ambos arcos y los delanteros desaprovecharon todas esas opciones, a Blooming le volvió a fallar la definición para descontar y buscar un mejor resultado.
-LAS INCIDENCIAS-
-LA FIGURA-
Juan Camilo Ríos, el defensor aportó mucho el primer tiempo con solidez a la hora de aguantar el arco en cero tras el intenso ataque de los celestes y estuvo atento para marcar el gol que liquidó el partido a favor de los yacuibeños.
-LAS CLAVES-
- Blooming tuvo la posesión del balón, presionó a Petrolero casi todo el partido pero al igual que a media semana les falló la definición para rescatar al menos un punto.
- Petrolero por el contrario estuvo fino a la hora de definir y esto les dio como premio los tres puntos de la jornada.
- Boyero no termina de encontrar el equipo que quiere para este torneo, la falta de entendimiento les jugó en contra frente a un plantel de Petrolero que mantiene la base y va consolidando sus líneas.
-LA SINTESIS-
-LO QUE VIENE-
Para la venidera cuarta fecha que se jugará esta media semana, Petrolero debe visitar a la U de Sucre en el estadio Patria el próximo jueves, en una nueva salida de Yacuiba en busca de un buen resultado que le permita por sobre todo escalar en la tabla del descenso. Blooming por su parte, recibe a Ciclón en el Tahuichi intentando levantarse de las dos derrotas consecutivas en condición de visitante.
