
El partido terminó tan caliente y con Ganso eufórico, que los Paulistas ingresaron al vestuario número tres del Hernando Siles y siguieron gastando al Tigre. Precisamente esa fue la queja de varios jugadores, que Jhonatan Calleri encendió todo y fue el foco de la patada y los golpes de los atigrados.
Cancheros, y eufóricos, este mensaje dejaron en las redes sociales desde el Siles para el Tigre los paulistas.