Bolívar llegó a la Sede de Gobierno en medio de un ambiente enrarecido, la dura derrota de Buenos Aires, golpeó el ánimo del equipo.
“Me da vergüenza volver, no podemos perder así” decía uno de los referentes del club, Walter Flores, que se disculpó con los hinchas que fueron a recibir al equipo en el Aeropuerto de El Alto.
Mucha autocrítica acompañó a Bolívar a La Paz, desde el entranador Xabier Azkargorta, hasta el último integrante del grupo, prefería el silencio que la charla en la espera de los vuelos, una señal clara del ambiente que acompañó al equipo.
“El miércoles hay que salir a matar y el primer tiempo hay que meter por lo menos tres goles para seguir con chance. Le pido disculpas a toda la afición, estamos muy dolidos, pero hay que dar vuelta rápido la página”, dijo rápidamente Flores al llegar a La Paz.
Desde la dirigencia, hay recuerdos que hablan de hazañas, y los hinchas en las redes sociales también apoyan la idea de ir al Estadio a pesar del mal momento para darle el apoyo a su equipo, otros menos prefieren vender sus entradas. Sin embargo, todos, jugadores, dirigentes e hinchas coinciden que es difícil, pero la campaña de Bolívar merece otro final, el 30 de julio tienen la chance de ello.
