Una experiencia que puede ser inolvidable

BUENOS AIRES. Caminar por la Boca en un día de partido es entender la idiosincrasia del fútbol en una de las zonas más populares, históricas y futboleras del mundo. El Buenos Aires del día a día se transforma en el Buenos Aires soñado en cada detalle de Caminito, que va desapareciendo y entre mezclándose con las camisetas de Boca en el gigante Alberto J. Armando.
Foto: Javier García Martino / Boca Prensa
Foto: Javier García Martino / Boca Prensa
Foto: Javier García Martino / Boca Prensa

BUENOS AIRES. Caminar por la Boca en un día de partido es entender la idiosincrasia del fútbol en una de las zonas más populares, históricas y futboleras del mundo. El Buenos Aires del día a día se transforma en el Buenos Aires soñado en cada detalle de Caminito, que va desapareciendo y entre mezclándose con las camisetas de Boca en el gigante Alberto J. Armando.

La República de la Boca vive entre su gente y sus visitantes, eso sí, todo se transforma cuando juega Boca Juniors. La zona comienza a cambiar de panorama, ya no se escucha tanto portugués o inglés de los turistas, incluso el popular museo del club está cerrado; Suena más el porteño, y cambian las cámaras de fotos por las camisetas azul y oro.

La policía comienza a cercar las zonas al estadio, los más tradicionales ya están comiendo un “chori” en las peñas cercanas al escenario, pasaron los molinetes sin necesidad de tener el carnet magnético -que reemplaza a las entradas y que son tan difíciles de conseguir- aunque la reventa existe, ofrecen plateas, las populares están prácticamente extintas, son imposibles de comprar para los simples admiradores, los socios usan su carnet y no se emiten más boletos para esos sectores, eso sí algunos alquilan el carnet para hacer algunos pesos.

Una vez adentro y lejos del tango, Gardel, y las fotos con las estatuas del papa Fransisco , el estadio comienza a llenarse, es muy difícil ver una Bombonera vacía, se habla de la fecha nueve de un torneo poco atractivo y en el que Boca está con pocas chances de ser campeón, pero no cabe nadie más, está lleno, comienzan los cánticos y el partido.

Y entonces sucede, es un momento esperado en la vida de todo futbolero, siente que le explota el pecho, la Bombonera comienza a latir, es literal, no es una leyenda, el público se conmociona -propios y extraños, no importa de qué club seas hincha- si estas en este espectáculo (certificado por la ISO 9001), te dejas llevar. Es muy normal que los ojos se agüen y en muchos casos hasta caiga una lágrima de emoción en los que lo experimentan por primera vez.

-CAMINITO-

Fotos: Ricardo Acosta / Late!

-LA BOMBONERA-

Fotos: Ricardo Acosta / Late!

Total
0
Shares
Related Posts
Read More

Así fue el desafío extremo del TTO 2017

En Copacabana se llevó a cabo el Titicaca Triatlón Olímpico 2017. A pesar de las inclemencias del tiempo, donde el frío y la intensa lluvia dominaron toda la carrera, los competidores lograron vencer las adversidades.