El paceño que brilló en el Clásico de su ciudad

Foto: Roberto Acosta / Late!

Raúl Castro es uno de los cuatro paceños que tuvo el Tigre en cancha, luego se sumó Jaime Arrascaita de Bolívar y fueron cinco lo jugadores nacidos en La Paz en la fiesta futbolera más grande de la ciudad Sede de Gobierno.

Pero uno de todos ellos sobresalió, Raúl Castrol, el Chacha, ese que apareció a sus 23 años en la Liga, ese que tuvo que remar en la Asociación del Fútbol de La Paz hasta que le dieran una chance en la Liga, ese que se fue a la U en busca de un espacio y no lo consiguió, ese mismo que ahora se ganó el apodo del el Comandante en el Tigre, ese que hasta pide un espacio en la Selección.

Castro agarró la pelota en media cancha, elegante, así juega él, dominó de derecha, esperó, pasaron dos rivales de largo; Enganchó con izquierda, los mismos rivales ya casi cayéndose se fueron por el otro lado, Castro tenía el arco de frente, la pinchó, le pegó con el borde interno pero rozando con la punta del pie derecho, la pelota se elevó en el cielo paceño y de golpe bajó, beso el travesaño y ante la mirada atónita de Quiñonez se metió en el arco celeste. Era el 1 a 0, el Tigre rompía el equilibrió.

Terminaron ganando por 2 a 0 con el segundo gol de Escobar, pero Raúl Castro se hizo dueño de las miradas, incluso de las patadas del equipo rival. El paceño tuvo su noche. Pasaron 75 partidos en primera desde su debut el 25 de agosto de 2013, casi dos años, ahora La Paz lo vio, un paceño brillando en el Clásico de la ciudad.