Salvo algunas en Preferencia, que se acabarán antes que termine el día, no quedan más entradas, las populares fueron las primeras en terminarse, curvas inexistentes, general terminadas, butacas reservadas, las filas en el Estadio fueron largas, difícíles y tensas a momentos.
La venta de localidades inició con demora y por eso hubo molesta, gente que desde la noche del jueves ya acampó en el cemento de Miraflores esperando por su entrada, enojada, apretada por los miles que fueron llegando más tarde comenzaron a exigir la venta. En esa espera hubieron peleas, discusiones, tensión.
Luego comenzó la venta y lo que había era nervios, porque las filas eran larguísimas, como en los viejos tiempos, cuando la venta por internet no existía, cómo cuando no había otra opción, como en este caso, bajo los casi 25 grados de temperatura, de un sol altiplánico intenso, los boletos se fueron acabando, seguramente muchos cayeron a manos de revendedores, pero es seguro que esta vez si hicieron su negocio, el Clásico Navideño ya tiene un marco humano impresionante, para soñar con un fiesta de fútbol inolvidable, más allá del resultado.
#LFPB #LaFinalxLate | Quedan pocas entradas, sólo en Preferencia! Se vendieron como pan caliente el resto (Fotos : @MarkaRegistrad1 ) pic.twitter.com/BBegSqRGVh
— Latedeportes Bolivia (@Latebol) December 23, 2016