Los dos grandes referentes de los últimos meses en Bolivia han sido Marcelo Martins y Juan Carlos Arce, los experimentados y que sostuvieron públicamente sus deseos y la ilusión de que Bolivia vuelva a la Copa del Mundo.
Esa imagen de fortaleza, de lucha, y los deseos que expresarion públicamente, se derrumbaron una vez terminó el partido con Chile, Bolivia quedó a un punto de perder cualquier chance -incluso matemática- de volver a un Mundial, y era lógico que ambos se planten en un vestuario abatido y tengan palabras de aliento a sus compañeros más jóvenes.
Arce fue más optimista y su mensaje tuvo que ver con lo que viene: “Siento mucha pena, pero viene otro mundial y se debe trabajar rápidamente”.
Pero Marcelo Martins, que incluso en el campo de juego ya mostraba su frustración con llanto en el rostro, entró al vestuario y según contó un testigo de esa charla en el vestuario a Late!, les dijo a sus compañeros que le dolía mucho no haber podido conseguir ir al Mundial. El actual goleador de la Eliminatoria, era el que más lo merecía y dejó la frase más triste de la jornada.
“Me duele mucho no ir a una Copa del Mundo”
Marcelo Martins en el vestuario a sus compañeros.
