Un gol de penal mete en la historia a Néstor Ortigoza, el primer título de Copa Libertadores para San Lorenzo y la locura en San Juan y Boedo.
El 20 de San Lorenzo, no fue un elegido al azar para ejecutar el penal más importante de la historia del club, Néstor tiene un récord impresionante, de 22 penales ejecutados sólo erró uno, es decir tiene 21 goles de penal con San Lorenzo.
Su especialidad, fue el fruto de la vida, cuándo Néstor Ortigoaza era niño aprendió a ser efectivo desde los doce pasos para sobrevivir, conmovedora historia.
“Jugué torneos de penales durante muchísimos años. Eran terribles. Se jugaban los viernes desde las 9 de la noche hasta las 6 de la mañana. En Gonzáles Catán, San Miguel y Merlo. Yo iba con mi tío Manuel y mi hermano Gustavo. Jugábamos por plata. La inscripción salía 10 pesos por persona. Y si ganabas te llevabas 1000 mangos por noche… En el barrio y en la cancha, los penales son muy difíciles. Allá tenés que patear toda la noche. Y cuando ya es muy tarde no sabés a dónde apuntarle, porque ya le diste a todas las puntas. Y profesionalmente, cuando te dan uno, tenés que asegurarlo como sea”. Néstor Ortigoza
