El debut de Mauricio Soria en su segundo ciclo como técnico atigrado tuvo dos versiones muy distintas de The Strongest. Durante la primera etapa, su equipo mostró su mejor cara en lo que va del campeonato, teniendo una clara idea de juego. Pero, ya con la ventaja de dos goles y la superioridad numérica, se desdibujó en la segunda mitad.
Teniendo un panorama completamente favorable, el Tigre la pasó muy mal los últimos minutos. Pablo Escobar, su capitán, lo reconoció abiertamente al finalizar el encuentro. “No jugamos el segundo tiempo”, admitió el Pájaro. Soria, por su parte, le atribuyó el bajón al mal estado físico del equipo, responsabilizando directamente al cuerpo técnico de Pablo Caballero. “Yo no me hago cargo del estado físico de este equipo, pregúntenle al anterior DT (…) aún tenemos mucho que trabajar físicamente, tácticamente y técnicamente”, declaró el nuevo entrenador.
Sin tiempo para lamentos, el cochabambino finalizó poniendo el foco en el próximo desafío de los aurinegros, ante San Pablo por Copa Libertadores. “En Brasil será igual, ir a sufrir por cómo esta este equipo”, cerró. Por la noche el equipo emprendió rumbo a Santa Cruz de la Sierra, para concentrar y aclimatarse en la previa a su debut en el certamen continental.
