El Gobierno de Estados Unidos solicitó formalmente al de Bolivia la detención preventiva con fines de extradición de los expresidentes de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) Carlos Chávez Landívar y Romer Osuna Áñez.
Osuna y Chávez figuran entre los 16 nuevos inculpados la semana pasada por la justicia federal de Brooklyn (Nueva York), denunciados por pedidos y pagos de sobornos por “más de 200 millones de dólares para vender derechos de retransmisión y marketing de torneos y partidos internacionales de fútbol”, según la acusación.
Chávez está detenido preventivamente en el penal de Palmasola de Santa Cruz en el marco de una investigación interna abierta por la Fiscalía General del Estado, que lo acusa por supuestamente haber cometido varios delitos, que no tienen nada que ver con el procedimiento que lleva adelante Estados Unidos. En cambio Osuna, quien radica en la capital oriental, está libre; sin embargo, ahora pesa en su contra un pedido de detención.
Tras conocer que fueron inculpados, ambos emitieron comunicados públicos poniéndose a disposición de la Justicia norteamericana para ser investigados. El Gobierno boliviano recibió el miércoles la solicitud mediante el Ministerio de Relaciones Exteriores y lo que procede ahora es analizar a través de un equipo jurídico si cumple con los requisitos establecidos en el tratado de extradición entre ambos países.
De ser así, la solicitud será enviada al Tribunal Supremo de Justicia, la única autoridad competente para determinar la detención preventiva. En el caso de Chávez, quien está detenido desde julio por orden del Ministerio Público, se aplica con carácter diferido, porque afronta un proceso en el país.
Fuente: La Razón – Jorge Asturizaga
