The Strongest cambió de cara y goleó a Real Santa Cruz

Con Pablo Cabanillas como técnico, The Strongest consiguió una victoria cómoda, que lo aleja de sus inmediatos perseguidores.

En una tarde fría, con las montañas que rodean a la Ciudad de La Paz totalmentene nevadas, The Strongest recibió la visita de Real Santa Cruz por la fecha 23 de la Liga Tigo. El Tigre comandado por Pablo Cabanillas goleó 4-0 a los Leones del Pajonal, que no presentaron resistencia alguna; los Gualdinegros se alejan en la punta y le saca 6 puntos de diferencia al segundo.

Previo al inicio del encuentro, el club Atigrado reconoció a Jaime Arrascaita, que cumplió su partido 100 con la camiseta oro y negro. Desde el pitazo inicial, el Tigre demostró tener otra actitud y se volcó al ataque; en 8 minutos, ocasionó 4 jugadas de gol y un penal a favor. El encargado de marcar desde los 12 pasos fue Kike Triverio. El primer tanto fue un envión anímico para el local, que no paro de atacar.


Al minuto 23′, Arrascaita lanzó un centro y con una gran bolea, Gabriel Sotomayor disparó al ángulo derecho del portero Torrez, quien sólo vio cómo la pelota entró al arco; el segundo tanto fue festejado con mucha euforia tanto por los hinchas presentes en el Siles, jugadores y cuerpo técnico, dirigido por Pablo Cabillas. Con la consigna, “si no es golazo, no vale” a la media hora de juego, Triverio dio un pase en el área a Ursino, quien disparó fuerte al ángulo izquierdo y convirtió el tercero del encuentro. Con seis remates a puerta, tres goles y el 73% de posesión del balón, el Gualdinegro se fue al descanso, mientras que Real Santa Cruz con un solo disparo al arco de Viscarra y sin una idea de juego clara.

Con la misma actitud, el Tigre salió al segundo tiempo de nuevo al ataque, Real Santa Cruz solo defendió y optó al contragolpe, pero ni uno con suerte. Al minuto 54′, Triverio hizo una pared con Sotomayor, quien de gran manera definió al palo izquierdo del arquero, convirtiendo el cuarto tanto del partido y segundo en su cuenta personal. Tres minutos después, el capitán Atigrado, Adrian Jusino de cabeza hizo el quinto gol, pero el VAR detectó una falta y lo anuló. El arquero Albo, Alejandro Torrez fue fundamental para que el partido no termine con un resultado más abultado.

El Tigre se limpió la cara y volvió a sacar sus garras, más afiladas que nunca. Se alejó seis puntos del segundo y apesar de estar en un momento complicado en lo institucional, tranquilizó a su hinchada con este resultado.

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