Teo y Román pagan la entrada de un superclásico que promete alto nivel. Bianchi, con Gago, vuelve al Monumental y Ramón pone a su equipo de gala. ¿Quién festeja?
Teo, Teo, qué es. Una cosa. Maravillosa. Color, color…
Y a la noche se sabrá si el rojo y blanco derrapó en sangre. O si el azul y oro se transformó en amarillo hediondo. Se juega el partido más importante de Sudmérica. El espectáculo que hay que ver antes de morirse. En el Monumental. Sin visitantes. Con Teo Gutiérrez. Con el Negro Balanta. Con Ramón. Con Román. Con Gago. Con Bianchi.
Con el “40% de los hinchas contra el otro 30%”, según el Virrey. Con “una cancha que va a explotar y se van a dar cuenta de lo que somos los hinchas de River”, según el Pelado. Con la nostalgia de lo que pasó. Con el optimismo de lo que vendrá.
Juegan Boca y River y se para la ciudad. Y es literal. O pegate una vuelta hoy, a las 18.15, por algún barcito sin tv. Las meriendas de las chicas serán furor. Como siempre, se viene un clásico con condimentos especiales, de ésos que sazonan cualquier plato.
La mesa está servida. En el templo de Labruna, el DT más ganador de la historia de River quiere seguir haciendo historia, tras firmar su flamante contrato por dos años más. Se la juega con su equipo de gala, el que usa cuando hay que “quemar las naves” y el que utilizaría si tuviera que enfrentar al Barcelona en el Camp Nou. La seriedad de Barovero, el buen pie del Lobo, la firmeza de Balanta, las proyecciones de Vangioni y los ¿goles? de Teo Gutiérrez. El colombiano disputará su primer superclásico y la adrenalina le recorre las venas. “Dios me permita hacerle un gol a Boca”, pidió en la semana a través de las páginas de Olé . El mismo delantero que llegó con cartel de estrella y que necesita ratificar su rumbo en un choque de alta gama, es el que entrará a la cancha con rótulo de protagonista principal.
El DT más ganador de la historia de Boca regresa al Monumental tras aquella gesta heroica-y silenciosa-de la Libertadores 2004. Su equipo, al igual que River, necesita los puntos para acelerar la pelea por la corona. Lo sabe Riquelme, que vuelve a jugar un Súper tras más de dos años. La última vez fue el 15/5/2011, aquel 2-0, justo el último clásico de Palermo. La bandera y el emblema de Boca compartirá hierba por segunda vez al hilo con Gago, luego de la grata demostración del domingo pasado. Y en esos cuatro botines sensibles, más el olfato de Gigliotti y la presencia del Cata (llega con lo justo) estará la buena vibra boquense, pese a los lesionados y las paperas que, a diferencia de Ramón, no le permiten a Bianchi disponer de su formación ideal.
Que haya goles. Unos cuantos. Y gargantas-rojas o azules-para gritarlos. Ta’ luego. Felicidades…
Fuente: Olé
———————o ———————
Boca, con 16 puntos, deberá ganar para mantenerse a cuatro del líder. Una derrota o un empate lo dejarán lejos (a 7 y 6 puntos, respectivamente) y, además, el equipo de Carlos Bianchi ya jugó contra Newell´s (perdió en la Bombonera) como para descontarle puntos de manera directa.
River, con 14, sabe que es la posibilidad de lanzar su candidatura al título, luego de un mal comienzo de campeonato. Los millonarios ganaron 10 de los últimos 12 en juego. Un traspié los dejará a 9 puntos de la cima. La victoria los mantendrá expectantes, aunque algo lejos a 6, pero con la posibilidad de descontar el próximo domingo cuando el equipo de Ramón Díaz visite a Newell´s, en Rosario.
Las probables formaciones para el superclásico, que será desde las 18.15, con TV por Canal 7 son las siguientes:
River: Barovero; Mercado, Maidana, Balanta y Vangioni; Carbonero, Ledesma y Rojas; Lanzini; Andrada y Teo Gutiérrez. DT: Ramón Díaz.
Boca: Orion; Méndez, Cata Díaz, Chiqui Pérez y Zárate; Gago, Erbes y Sánchez Miño; Riquelme; Burrito Martínez y Gigliotti. DT: Carlos Bianchi.
Fuente: Canchallena.com.ar
———————o ———————
