La victoria de Costa Rica sobre Uruguay no fue una más, esa victoria fue histórica, primero por el rival, segundo por la forma, tercer el lugar.
Casi en su totalidad, el Brasil futbolero festejó el triunfo Tico, los goles eran festejados, el estadio cantaba “Eu sou brasilero, con muito orgulho y muito amor”, la gente en Brasil, nunca imagino que iba a ser en este primer juego que les llegaría el momento de la revancha.
El fantasma que mandó Uruguay desde el día de su clasificación a Brasil 2014, definitivamente se instaló en la sede, y por eso los brasileños decidieron hacer propios cada uno de los goles de Costa Rica, 64 años de bronca acumulados en un grito de gol, así se vivió en Brasil la durísima caída charrúa.
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